La captura y apresurada liberación de Karina Mora, esposa de José Antonio Yépez,“El Marro”, expuso la vieja herida de los deficientes operativos de la policía mexicana.
Sobre la cónyuge del líder del Cártel Santa Rosa de Lima —capturada el pasado 29 de enero— pesaba una acusación sobre portación de armas exclusivas del Ejército y Fuerzas Armadas, incautadas en una supuesta casa de seguridad en la comunidad San Miguel Octopan, en Celaya, Guanajuato.
Sin embargo, la imputación fue echada abajo luego de que un juez federal determinara que los agentes estatales catearon el inmueble sin ninguna orden judicial. Durante la detención, Karina estaba acompañada por César «N», Serafina «N» y Alfonso «N», quienes también fueron puestos en libertad.
El 29 de enero, fuerzas estatales catearon un domicilio donde había cuatro armas de fuego, dos calibre 9 milímetros, un fusil de asalto AK-47, y un rifle calibre 270. Así como más de 800 cartuchos útiles de diversos calibres, cuatro cargadores abastecidos, dos portafusiles y dos artefactos explosivos metálicos.
También decomisaron tres chalecos balísticos, dosis de drogas, tres vehículos, dos cuatrimotos marcas Can-Am Outlander modelos 2017 y 2019 con los números de identificación alterados y más de 69, 000 pesos.
Después de la detención de Karina Mora, se difundió un mensaje en redes sociales que advertía sobre un “relajo” en el estado de Guanajuato. Las autoridades desmintieron la advertencia, incluso señalaron que “El Marro” estaba acorralado.
La detención de su esposa vendría a corroborar la determinación del gobierno estatal de atrapar al enemigo público número uno de México.
El Secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, lamentó la liberación de Mora.
“Lamentamos hechos como los que se registraron ayer en el sentido de que la pareja sentimental de uno de los líderes criminales más relevantes de la entidad fue liberada, el juez alega fallas al debido proceso, nosotros respetamos la decisión del juez pero no deja de ser lamentable que después de un esfuerzo de investigación relevante, nos encontremos con que de nuevo algunas personas regresen a la calle sin haber pagado debidamente la responsabilidad por la presunta comisión de algún delito”.
Aunque las autoridades han puesto el foco en la violencia desatada por la familia del Marro, ésta no es la primera vez que los allegados al líder huachicolero son detenidos y puestos en libertad.
El 8 de marzo del 2019, Angélica Mora, cuñada de Yépez Ortiz y hermana de Karina, fue capturada junto a su pareja sentimental, un policía federal en activo, en ese momento identificado como Javier «N», acusados de portación de armas de fuego.
La detención se realizó en la comunidad Santa Rosa de Lima, dentro del operativo Golpe de Timón, que buscaba la detención de “El Marro”; sin embargo, un juez determinó dejarlos en libertad al no hallar elementos para vincularlos a proceso.
Trascendió que antes de su captura, la supuesta pareja criminal había celebrado una exclusiva boda en un balneario de la comunidad de Tierra Blanca, Veracruz, lugar de origen de Angélica y su hermana Karina.
Ambas eran reconocidas por su alta actividad en redes sociales. Según la información existente, conforme creció el nivel de vida de las hermanas, comenzaron a apoyar a sus amigos y a varias causas de la ciudad.
En marzo de ese año también fue cateada la casa de la mamá de Karina y Angélica. En el inmueble, localizado en la comunidad de Tordecillas en Villagrán, había imágenes religiosas, fotos de Yépez Ortiz, drogas y sobres con dinero.
Las fotografías ahí encontradas, fueron difundidas en redes sociales. En ellas se mostraba al criminal acompañado de una mujer al parecer, Karina.
